El verano, con sus días largos y soleados, es una época que asociamos con el descanso y la diversión. Sin embargo, para nuestros mayores, las altas temperaturas pueden representar un riesgo significativo para su salud.
En Abrente, centro de día en Vilagarcía de Arousa, sabemos lo importante que es adaptar los cuidados durante esta estación para garantizar su bienestar. Sin más dilación, en este post te contamos cómo proteger a nuestros seres queridos del calor estival.
Hidratación: la clave fundamental
La deshidratación es uno de los principales peligros del verano para las personas mayores. Por ello, resulta crucial ofrecerles líquidos de forma regular, incluso si no los piden. El agua es la mejor opción, pero también pueden consumir zumos naturales, infusiones frías o caldos ligeros.
Igualmente, es mejor no consumir bebidas con cafeína o muy azucaradas, ya que pueden tener un efecto diurético. Tener siempre una botella de agua a su alcance y recordarles beber a menudo es una práctica sencilla pero vital.
Protección solar y vestimenta adecuada
La piel de los mayores es más sensible a los efectos del sol. Se debe evitar la exposición directa en las horas centrales del día (entre las 12h y las 17h). Si salen, deben usar protector solar de amplio espectro, aplicándolo generosamente en todas las áreas expuestas.
La vestimenta es otro aspecto que debemos tener en cuenta: prendas ligeras, de colores claros y tejidos transpirables como el algodón o el lino les ayudarán a mantenerse frescos. Un sombrero de ala ancha y gafas de sol son complementos imprescindibles para protegerse.
Alimentación y adaptación del entorno
Durante el verano, es recomendable optar por comidas ligeras y frescas, ricas en frutas y verduras. Ensaladas, gazpachos, sopas frías y yogures son excelentes alternativas que aportan hidratación y nutrientes esenciales. Debemos evitar las comidas copiosas o muy grasas que dificultan la digestión.
En el hogar, es importante mantener el ambiente fresco y ventilado. Podemos usar ventiladores o aire acondicionado de forma moderada, asegurándonos de que la temperatura no sea excesivamente baja para prevenir cambios bruscos. Las persianas bajadas durante las horas de sol y las ventanas abiertas por la noche (si la temperatura exterior lo permite) también contribuyen a mantener un ambiente agradable.
Confía en nuestro centro de día en Vilagarcía de Arousa
En Abrente contamos con un equipo especializado y unas instalaciones adaptadas para garantizar el confort y la seguridad de nuestros mayores durante cualquier época del año. Ofrecemos actividades refrescantes, menús adaptados a la estación y un seguimiento constante de su estado de salud.
Si necesitas apoyo en el cuidado de un familiar durante estos meses, no dudes en contactarnos. Haremos que tus seres queridos disfruten de un verano seguro y pleno.